viernes, 28 de diciembre de 2012


Una Villa y su escuela



Un lugar lleno de conocimiento se establecía todos los días en la pequeña sala del Cabildo de Luján para brindarles a los niños de la Villa las herramientas necesarias para formarse moral y éticamente como un ciudadano sensato y razonable. Creado en 1773, este establecimiento fue la primera escuela pública que existió en el actual territorio de la provincia de Buenos Aires. El primer maestro fue el señor Miguel Jerónimo Benítez, y era el encargado de enseñarle a los alumnos las reglas básicas del aprendizaje: leer, escribir, contar y la doctrina cristiana.

Esta escuela fue creada para alfabetizar a los hombres que luego ocuparían cargos  administrativos en el Cabildo o dirigirían la unidad de caballería Blandengues, que defendía la frontera.

Desde 1795 ese lugar de aprendizaje se estableció en un cuarto del nuevo edificio de la Casa Cabildo. Allí funcionó hasta el año 1823, cuando fue trasladado a una habitación del santuario.

En aquellos tiempos la niñez duraba pocos años debido a que a esa edad comenzaban las obligaciones que los integrarían al mundo de los adultos. A pesar de que las escuelas que existían eran abiertas para ricos y pobres, los niños de familias adineradas obtenían mayor educación ya que eran enviados a las universidades europeas.  En cambio los varones que pertenecían a hogares de menor recurso eran enviados a trabajar.

Los registros de la época demuestran que las niñas no corrían la misma suerte. Ellas eran educadas para empezar a desarrollar las habilidades que las prepararían para su único destino: el matrimonio. Sin embargo, las chicas de las clases alta y media estudiaban unas escasas letras, mucho bordado, costura y música.

Un ejemplo claro es el del General José de San Martín, quien a los 12 años ya combatía en España.  Su mujer, remedios de Escalada, contrajo matrimonio a los 14 años.  Tanto es así que todos,  sin excepción, a los trece o catorce años ya estaban ocupando el rol de los grandes.




jueves, 20 de diciembre de 2012


89º Aniversario

Festejos y  conservación del patrimonio

En ese acto, la directora de la institución, Araceli Bellota, especificó que "las piezas en depósito fueron recuperadas para que el público las disfrute". También, se pudo conseguir el arreglo de un importante monumento Nacional, como lo es la Casa de Pepa Galarza, y se presentó la nueva señalética que orientará al visitante dentro del museo.


En las celebraciones por los 89º Aniversarios que cumplió el Complejo Museográfico Enrique Udaondo, la directora de la institución, Araceli Bellota, expuso el viernes, los nuevos logros que se vienen alcanzando en su gestión.

Ante un gran número de presentes, Bellota dijo que "en una fecha tan especial, se inaugura un nuevo sector en el museo denominado Galería con Bustos". Este espacio, posee numerosas esculturas en bronce  de Bartolomé Mitre, Martín Guerrico, Nicolás Avellaneda y Manuel Belgrano, entre otros personajes relevantes de la historia del país.

Para explicar el origen de esta idea, la directora manifestó: "Todas estas tallas estaban en los depósitos. Dentro de nuestra política de intentar sacar más objetos del patrimonio para que el público los pueda disfrutar, decidimos aprovechar este espacio y exhibirlas". Así mismo, la restauradora del complejo Gladys Scarnatto, reveló que "las obras presentadas, que pertenecen a grandes fundidores y escultores franceses e italianos, empiezan a mediados del siglo XIX, cuando comienza el auge de las grandes esculturas con el propósito de ornamentar el espacio público, y terminan ya entrado el siglo XX, donde incluso hay  tallas de artistas argentinos, como (Luis) Perlotti".

En el Patio de Honor, se emplaza la escultura de Don Enrique Udaondo, que fue restaurada, gracias a la colaboración del Museo Perlotti, para recuperar la imagen original que creo su autor, Orlando Paladino, quien homenajeó hace años al emblemático director del museo. "La obra se hizo con distintas piezas de bronce provenientes de numerosas donaciones, hecho que hace que tenga diferentes aleaciones", expresó Scarnatto. En este sentido, la restauradora enumeró las diversas técnicas que se utilizaron: "Se le hizo una intervención química, una reacción para revertir las sulfataciones y luego se la retocó con oleos y se le pasó una cera microcristalina para darle durabilidad”. 

En el área IV del museo, se encuentra una de las edificaciones más antiguas de la provincia de Buenos Aires, la Casa de Pepa Galarza. Esta vivienda, de la primera mitad del siglo XIX, sufrió deterioros que se pudieron detectar y restaurar a tiempo. "Es una alegría poder tenerla abierta de nuevo. La lucha contra la humedad es constante, pero a partir de ahora vamos a poder mostrarla en todo su esplendor", aseveró Araceli.

La recuperación del viejo molino, colocado en el museo de transporte, es una incansable tarea que se esta llevando a cabo de a poco, gracias a los aportes de la familia Llorente, quienes lo donaron. Bellota declaró que "la idea es poder poner el molino en funcionamiento.  Ya casi se terminaron de remplazar los pisos interiores de madera, que estaban apolillados”. Además, por las cooperaciones de la Asociación de la Tradición Náutica Argentina (ATNA), se le están haciendo arreglos al famoso velero Legh de Vito Dumas, que realizó asombrosas expediciones en el mar.

"Los trabajos marchan lentos por la complejidad que presentan, pero avanzan a paso firme”, explicó la directora del Complejo.

"En el futuro inmediato queremos empezar con la recuperación de la sala de ex -modas y arreglar el querido Salón Balcarce, una ausencia muy sentida por todos los lujanenses. Como es una obra de gran envergadura, seguramente vamos a apelar a la colaboración de vecinos e instituciones de la ciudad", concluyó Bellota.

Espacios señalizados 

Por otro lado, este agasajo también sirvió para presentar el proyecto de señalética, con el que pronto contará el área I del museo. Para ello, se encontraba en el lugar el Secretario Ejecutivo del Instituto de Promoción Turística (IMPROTUR), Leonardo Boto, quien contó: “Cuando recorrimos el museo, nos dimos cuenta que le faltaba una señalización adecuada para que el visitante no se sintiera perdido. Por eso, recurrimos a la colaboración de todos los empleados del museo para armar esta señalética”.




viernes, 14 de diciembre de 2012



A metros de la Basílica Nuestra Señora de Luján, podrás encontrarte con el Museo de Transporte e Histórico Provincial. El Complejo Museográfico “Enrique Udaondo” atesora importantes piezas del pasado con magia propia.

De miércoles a domingo podrás disfrutar de su circuito histórico y temático*. Una conjunción de salas que invitan a recorrerlas, te espera todas las semanas.


Días y Horarios


  • De miércoles a viernes de 11.30 a 16.30 HS.




  • Sábado y domingo 10.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)




  • Feriados de 12.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)

















Fotografía de la página web Luján Hoy 
















Una oferta que no te podes perder. Vení a conocer nuestro Patrimonio Nacional.

Valor de la entrada: $ 5 por persona. Jubilados, pensionados, menores de 11 años y estudiantes de primaria o secundaria, no abonan. 

Para solicitar visitas guiadas a escuelas debe llamar al: 02323- 420245

*En el Museo Histórico se encuentran abiertas las salas: Una Villa y su escuela, Cabildo de Luján, Invasiones Inglesas, Revolución de Mayo, Luchas por la Independencia, Gaucho (El Arte en la cultura Criolla) y Aborigen (Eterna Magia de lo Sagrado).

Esta medida se dispuso debido al trabajo que sigue realizando el personal del Complejo para el rearmado de las salas. Disculpe las molestias.

Muchas Gracias!



Museo Histórico Colonial 



Cabildo

Creado a mediados del siglo XVIII, el Cabildo de Luján ostentó el privilegio de ser uno de los únicos que existía en el territorio pampeano. Su arquitectura imitó el estilo de los pequeños ayuntamientos españoles.

Al actuar como el gobierno de la ciudad, sus funciones consistieron en el cuidado de la cárcel, la defensa de los más necesitados, la protección y el abastecimiento de toda la población, la conmemoración de festividades civiles y religiosas y toda clase de cumplimiento político o judicial que se encontró relacionado con los intereses  públicos.

Dotado de una planta alta, donde sesionaron los cabildantes, y  una planta baja -donde se encontró la sala del Alguacil, la primera escuela de la zona y los calabozos-  este Cabildo posee entre sus muros una enorme riqueza histórica. Muchos acontecimientos relevantes se dieron cita aquí en tiempos de la Colonia, los más importantes fueron: El encarcelamiento del General  José María Paz entre 1835 y 1839, el robo de caudales y posterior arresto de los jefes ingleses en la etapa de las Invasiones Inglesas. Además, en menor medida; estuvieron presos  el General ManuelBelgrano, en 1814; el brigadier Saavedra, en 1819, y el General Bartolomé Mitre, en 1874.

En 1821, por orden de la legislatura provincial, el Cabildo de Luján cerró sus puertas y dejó de sesionar los asuntos de los pobladores de la Villa. Un tiempo después funcionó como Juzgado de Paz, comisaría y Municipalidad de Luján.

El 12 de octubre de 1923, a través de un pedido realizado por la comunidad lujanense a las autoridades provinciales, el edificio del Cabildo reabrió sus puertas.  Pero esta vez para atesorar esa historia que le tocó vivir en la época colonial.

En la actualidad, el Complejo MuseográficoProvincial “Enrique Udaondo” resguarda, entre sus paredes  más de 150 años de historia argentina y un Patrimonio Nacional que quiere compartir con todos ustedes.  







Bienvenidos.

viernes, 7 de diciembre de 2012




A metros de la Basílica Nuestra Señora de Luján, podrás encontrarte con el Museo de Transporte e Histórico Provincial. El Complejo Museográfico “Enrique Udaondo” atesora importantes piezas del pasado con magia propia.

De miércoles a domingo podrás disfrutar de su circuito histórico y temático*. Una conjunción de salas que invitan a recorrerlas, te espera todas las semanas.


Días y Horarios


  • De miércoles a viernes de 11.30 a 16.30 HS.




  • Sábado y domingo 10.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)




  • Feriados de 12.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)





















Una oferta que no te podes perder. Vení a conocer nuestro Patrimonio Nacional.

Valor de la entrada: $ 5 por persona. Jubilados, pensionados, menores de 11 años y estudiantes de primaria o secundaria, no abonan. 

Para solicitar visitas guiadas a escuelas debe llamar al: 02323- 420245

*En el Museo Histórico se encuentran abiertas las salas: Una Villa y su escuela, Cabildo de Luján, Invasiones Inglesas, Revolución de Mayo, Luchas por la Independencia, Gaucho (El Arte en la cultura Criolla) y Aborigen (Eterna Magia de lo Sagrado).

Esta medida se dispuso debido al trabajo que sigue realizando el personal del Complejo para el rearmado de las salas. Disculpe las molestias.

Muchas Gracias!


sábado, 17 de noviembre de 2012




El Complejo Museográfico Provincial "Enrique Udaondo" reabrirá las puertas del Museo de Transporte el  sábado 24 de noviembre de 10.30 a 17.30 Hs.

Los esperamos para disfrutar de este maravilloso espacio histórico.





Domingo y Lunes también estará abierto. 

Domingo de 10.30 a 17.30 Hs. 

Lunes de 12.30 a 17.30 Hs. 




martes, 6 de noviembre de 2012



Ante el inminente desborde del Río de Luján, el casco histórico se vio afectado y debió sufrir el ingreso de agua en sus diferentes dependencias.

Gracias a las tareas realizadas por todo el personal del Complejo Museográfico Provincial "Enrique Udaondo", las piezas que posee la institución fueron resguardada. Por este motivo, el museo permanecerá cerrado al público hasta nuevo aviso.

No obstante, una vez que el río volvió a su cause, las diversas áreas que trabajan en el lugar están abocados a la limpieza y armado de las salas que debieron ser protegidas.

Le rogamos, nos disculpen.

A través de Facebook, Twitter o nuestro Blog, le estaremos informando cuando volveremos a abrir las puertas del Complejo para compartir junto a ustedes las riquezas históricas que atesoramos.







Desde ya Muchas Gracias por su comprensión!

Consultas al: 02323-420245


miércoles, 31 de octubre de 2012


Lamentablemente, debido a la crecida del Río Luján, ambos museos permanecerán cerrados para resguardar el patrimonio que atesoran.



Luján en Línea






Cualquier consulta, estamos a su disposición mediante los siguientes medios


Mail: museolujanudaondo@gmail.com

Disculpen las molestias.


Complejo Museográfico Provincial "Enrique Udaondo"




viernes, 26 de octubre de 2012



A metros de la Basílica Nuestra Señora de Luján, podrás encontrarte con el Museo de Transporte e Histórico Provincial. El Complejo Museográfico “Enrique Udaondo” atesora importantes piezas del pasado con magia propia.

De miércoles a domingo podrás disfrutar de su circuito histórico y temático. Una conjunción de salas que invitan a recorrerlas, te espera todas las semanas.


Días y Horarios


  • De miércoles a viernes de 11.30 a 16.30 HS.




  • Sábado y domingo 10.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)




  • Feriados de 12.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)






Una oferta que no te podes perder. Vení a conocer nuestro Patrimonio Nacional.

Valor de la entrada: $ 5 por persona. Jubilados, pensionados, menores de 11 años y estudiantes de primaria o secundaria, no abonan. 

Para solicitar visitas guiadas a escuelas debe llamar al: 02323- 420245





Paso a paso, todo el Museo Provincial de Transporte (última parte )













Carroza de los gobernadores de la provincia de Buenos Aires

Material: Madera, hierro, vidrio y cuero.

Capacidad: 4 personas adentro y 1 persona afuera (cochero)

Procedencia: Francia.

Época: Segunda mitad del siglo XIX.

Antecedentes: Es una Berlina de lujo. Fue estrenada por Valentín Alsina en 1857 y estuvo en uso hasta 1893. Construida por el célebre fabricante Víctor Lelorieux. Su interior esta forrado de seda, tiene siete ventanillas cubiertas en terciopelo con cristales biselados y cortinas de seda blanca. La caja está totalmente pintada de negro con rebordes de plata aplicada.
















Carroza Presidencial 

Materiales: Madera, hierro, vidrio y cuero.

Capacidad: 4 personas adentro y 1 persona afuera (cochero).

Procedencia: París.

Época: Década de 1870.

Antecedentes: Adquirida por el gobierno en 1870, estando en ejercicio presidencial Domingo Faustino Sarmiento. Caja de madera de fresno pintada de negro. Ventanillas con vidrios biselados. Tapizada en seda. Su exterior ostenta numerosos adornos de cobre plateado, labrados, cincelados y calados.
Fue utilizada por los presidentes: Domingo Sarmiento,Nicolás Avellaneda, Julio A. Roca, Miguel Ángel Juárez Célman, Carlos Pellegrini y Roque Sáenz Peña.






Carruaje Fúnebre

Procedencia: Argentina.

Época: Década de 1880.

Antecedentes: Imponente coche de madera en el que cuatro fornidos negros con el, torso al aire, sostienen un artístico techo tallado, sobre el mismo se destaca una cruz muy labrada. Los penachos de plumas que adornan el coche, como así también las cortinas se usaban negras cuando el fallecido era una persona mayor y blanco cuando se trataba de un niño o “angelito” como lo llamaban en ese caso.







Carretilla

Materiales: Madera, Hierro.

Antecedentes: Corría el año 1935, en un campamento petrolero cerca de Laguna Grande, provincia de Santa Cruz, en una rueda de amigos, el vasco Guillermo Larregui dijo que era capaz de llegar a Buenos Aires empujando una carretilla con 100 kilos de carga.

Establecida la apuesta, inició su sacrificado raid el 25 de marzo de 1935, saliendo de la localidad santacruceña de Comandante Luis Piedra Buena.

Después de 14 meses de recorrer más de 2000 kilómetros y de soportar toda clase de dificultades y penurias, llega a Buenos aires el 24 de mayo de 1936, donde se le brindó, en la Avenida de Mayo, frente al local del diario “crítica” un gran recibimiento popular.

En junio de ese mismo año, decide donar la carretilla a este Museo.
Muere en 1964, a los 79  años de edad, en las proximidades de las Cataratas de Iguazú, donde se había radicado después de hacer otros viajes y habitar una pintoresca casita hecha con latas multicolores.

Video del canal Todo Noticia. El programa En el Camino (Historia del vasco de la carretilla)

http://tn.com.ar/programas/en-el-camino/el-vasco-de-la-carretilla_096719






Velocípedo

Materiales: Hierro y madera.

Capacidad: 1 persona.

Procedencia: Inglaterra.

Época: 1880.

Antecedentes: Fue traído a nuestro en 1901 y donada por el señor Stratford para su colección de objetos curiosos. La rueda tiene un diámetro de 1,40 metros y la de atrás 0,40 metros.


















Papamóvil

Marca: Chevrolet.

Tipo: Pick up.

Modelo:  C-10 CUS/1987

Dominio: C 1388.042

Fabrica: Sevel Argentina (hoy Peugeot Citroën Argentina, S.A.)

Antecedentes: Fue preparado especialmente por la empresa Sevel para transportar a su santidad Juan Pablo II, con motivo de su visita a nuestro país en el mes de abril de 1987.

Este vehículo adquiere mayor significado, debido a que en mayo de 2011, Juan Pablo II  fue consagrado “beato” por el Vaticano.





jueves, 25 de octubre de 2012


Paso a paso, todo el Museo Provincial de Transporte (Parte V)


La mole de hierro que superó al hielo

Un transporte que fascina a cada persona que visita el museo, sea chico o grande, es el vehículo snow-cat. Una de las grandes maquinas que se utilizaron en la primera expedición terrestre, hecha por la Argentina, al Polo Sur.



Operación 90

A esta operación se la bautizó así por los 90 grados sur de latitud que tiene el Polo. Su comandante a cargo fue el Coronel Jorge Leal, quien contó con el apoyo de 10 hombres y seis tractores oruga snow-cat para recorrer 2.900 kilómetros en la zona más inhóspita, teniendo que soportar muy bajo clima, vientos blancos y las profundas grietas que se forman en el hielo. 

Un viejo anhelo del general Hernán Pujato; fundador de las Bases San Martín, en Bahía Margarita, y Belgrano, en la barrera de Filchner; fue el puntapié inicial para darle forma a esta aventura deseada por todos los argentinos: Colocar la bandera argentina en el vértice sur de la Patria. Así se reafirmaría los derechos de la soberanía territorial esgrimidos por el país en la Antártida Argentina.

En noviembre de 1963 el personal del Ejercito del Belgrano, base donde se realizaban las operaciones, comenzó a analizar las formas de acceder al interior del continente para colocar una base secundaria, con todo lo necesario, aproximadamente, a los 83 grados de latitud Sur.

Crónica de la aventura

En 24 de octubre de 1965 es enviada una patrulla, denominada 82, con 4 hombres provistos de trineos para que asegurarán la ruta hasta los 83,2 grados Sur. Además, su comandante, el Teniente Adolfo Eugenio Goetz, efectuaría inspecciones geológicas, analizando una zona totalmente nueva para el conocimiento del hombre.

Al contar con el trayecto marcado previamente, dos días más tarde, el grupo de la Operación 90 salió a buscar la travesía más importante, es decir, descubrir todos los rincones de lo que el país considera su soberanía en el territorio. 

Al día siguiente, soportando ráfagas que anulaban la visión y áreas de grandes grietas, los Snow-Cat y los trineos de la patrulla continuaron su marcha hasta el cordón Santa Fe. A la Base Sobral, llegarían el 4 de noviembre, resistiendo temperaturas que rondaban los 33 grados bajo cero. 

El jefe de la expedición describe, en un comunicado que envía al Comando en Jefe del Ejército, el lugar con el que se encontraban a cada paso: “El teatro en donde se desarrolló la Operación 90 forma parte de un continente extraño, que por sus condiciones geoglaciológicas, su clima, por inhóspito y falto de todo recurso, se opone terca y porfiadamente al cumplimiento de toda misión. Una tierra en donde se enseñorea una hostil naturaleza —la más fría y tempestuosa del planeta— reacia a los hombres, perros y máquinas y en donde las tormentas polares y las interferencias magnéticas anulan las comunicaciones y afectan a los instrumentos volviéndolos inexactos e influyendo, por lo tanto en la inteligente confianza que el hombre debe depositar en los mismos. Un lugar en donde los lubricantes se convierten en sebo y los metales se cristalizan, donde las mejores aleaciones se quiebran al desintegrarse la materia”.

Casi un mes después de haber realizado el trabajo de abrir los caminos necesarios para llegar al objetivo, la Patrulla 82 se separó del grupo comandado por Leal. Una vez solos, los expedicionarios siguen su arduo recorrido para concluir la marcha hacia su mayor ilusión.

La meta era clara, pero los obstáculos eran cada vez más grandes. Se transitaba en intervalos largos y las maquinas sufrían desperfectos que hacían estudiar la continuidad de la expedición, debido a que sin los trineos era imposible llegar al Polo Sur. Un snow-cats fue dejado en el camino como deposito de combustible y guía para hallar con facilidad el camino de regreso.

La situación era complicada, sin embargo se planeó emplazar un campamento, sobre los 83 grados de latitud Sur y a 1.900 metros de altura sobre el nivel del mar, para arreglar las averías. Una vez que se compuso el estado general del transporte, la Operación 90 continuó su camino y logro llegar, luego de 45 días, al Polo Sur.

Es izada la bandera Argentina en el Polo Sur.


El 10 de diciembre de 1965, el Coronel Leal arriba en el lugar y coloca la bandera de la Patria, donada  por la Asociación Antártica Argentina, en el solitario punto Sur de la Argentina. 

Los expedicionarios:


  • Coronel Jorge Edgard Leal (jefe del Grupo de Asalto);
  • Capitán Gustavo Adolfo Giró (segundo jefe / jefe de tareas científicas);
  • Suboficial principal Ricardo Bautista Ceppi (mecánico);
  • Sargento ayudante Julio César Ortíz (mecánico);
  • Sargento ayudante Alfredo Florencio Pérez (mecánico);
  • Sargento primero Jorge Raúl Rodríguez (mecánico);
  • Sargento primero Roberto Humberto Carrión (topógrafo);
  • Sargento primero Adolfo Oscar Moreno (topógrafo);
  • Sargento primero Domingo Zacarías (comunicaciones);
  • Cabo Oscar Ramón Alfonso (patrullero).
  • Pérez se incorporó en Sobral elegido por votación en remplazo del sargento primero Carlos Guido Bulacio.


Integrantes de La Patrulla 82:


  • Teniente Adolfo Eugenio Goetz (jefe de Patrulla 82);
  • Sargento primero Ramón Villar;
  • Cabo primero Marcelo Enoc Álvarez;
  • Cabo primero Leonardo Isabel Guzmán.

Además de Pérez dieron apoyo en Sobral:

  • Teniente Pedro Ángel Acosta (jefe de Grupo);
  • Sargento primero Hugo Orlando Britos.



El mismo día en que se conmemora el inicio de la aventura hacia el Polo Sur, pero de 2008, es trasladado un tractor Snow-Cat al Complejo Museográfico "Enrique Udaondo". En la actualidad, se encuentra en el Museo de Transporte junto al Plus Ultra, el Papamóvil o el velero Lehg.


Continuara....

miércoles, 24 de octubre de 2012


Paso a paso, todo el Museo Provincial de Transporte (Parte IV)

La aventura marítima 

Para empezar a contar la historia del velero denominado Lehg, que atesora el Complejo Musegráfico "Enrique Udaondo", empecemos por hablar de quien lo condujo por esa maravillosa aventura. Este fue el reconocido navegante y deportista Vito Dumas.

A pocos meses de comenzado el siglo XX, nace Vito Dumas, más precisamente el 26 de septiembre de 1900. Desde su juventud, ya se vislumbraba su pasión y habilidad para realizar actividades relacionadas con el agua. Su primera hazaña la realizó, de manera solitaria, en un barquichuelo de nueve metros sin ninguna herramienta y se desplazó desde Francia hasta Buenos Aires.
(Fuente: La Nación)



En 1932, se dedicó a probar suerte con una pequeña embarcación de 8 metros de largo por 2,15 de ancho, a la que  llamó Lehg. Ese viaje, que duro ciento veintidós días, tuvo sus complicaciones al principio, pero Dumas supo superar esas barreras y consiguió concluir la travesía cruzando todo el océano Atlántico hasta llegar a Buenos Aires. 

Abrumado por todas las penurias que tuvo que pasar, manifestó que no volvería a navegar, vendió el Lehg y se dedicó al cuidado del campo. Actitud que no dura demasiado porque un amigo suyo lo ayudó a conseguir una embarcación y la historia de aventuras en el mar, se volvió a repetirse.

Esta vez, al velero lo nombró Lehg II y con él planeaba dar la vuelta al mundo. Construido en Francia, media un poco más que el primero: 9,50 de eslora (largo) y 3,20 de manga (ancho).

En plena Segunda Guerra Mundial, el 1º de julio de 1942, se lanzó a conquistar mares y océanos. Su mayor objetivo era conseguir dar la vuelta al mundo atravesando 20.420 millas marinas y muchos peligros como por ejemplo: traspasar la terrible zona de “Los Cuarenta Bramadores”, ubicada al sur del paralelo de 40 grados.

Así lo expresó el propio Vito en su libro, "Los 40 Bramadores": “He iniciado el viaje hacia el continente africano, del que me separan más de cuatro mil millas. Conoceré el terrible efecto de los cuarenta bramadores. Es la primera vez que un hombre solo se arriesga a navegar en esa latitud. Que me deparara el mañana? Por de pronto, se que todo mi mundo y mi seguridad residen en estas maderas que me cobijan”.

Recorrido

Durante 55 días de travesía, surcó desde Montevideo hasta Ciudad del Cabo, Sudáfrica; de allí a Wellington (Nueva Zelandia), con olas de 18 metros de altura, navegó 104 días; desde ahí a Valparaíso, Chile, a través del Océano Pacífico (72 días de navegación). Desde Valparaíso, por el sur argentino, más precisamente el Cabo de Hornos, hasta Mar del Plata, y de allí costeando a Buenos Aires. Tardó un año y 36 días en cumplir el objetivo que se había fijado.


Trayecto ilustrado 


Luego de 437 días y gracias a su valentía, logró realizar su meta. El 7 de septiembre de 1943,  regresó a Buenos Aires victorioso pero un poco golpeado por las dificultades que le toco vivir.

Dumas reflexionaba así en su libro "Los 40 Bramadores": “Qué extraños esos primeros pasos! Qué indecisión! Me parece que la tierra se balancea. Pero no; allá está el barco fondeado: mí querido Lehg II. Trabajo cuesta pensar que ha surcado ese enorme mar y que ahora se mece dulcemente en abrigadas aguas”.

Hoy la embarcación se encuentra en nuestro querido Museo de Transporte de Luján. Los esperamos para que lo conozcan e imaginen, junto a Vito Duma, esa gran aventura. 


Lehg I


Video con imágenes de su travesía 



Continuara.....

martes, 23 de octubre de 2012



A metros de la Basílica Nuestra Sra. de Luján, podrás encontrarte con el Museo de Transporte e Histórico Provincial. El Complejo Museográfico “Enrique Udaondo” atesora importantes piezas del pasado con magia propia.

De miércoles a domingo podrás disfrutar de su circuito histórico y temático. Una conjunción de salas que invitan a recorrerlas, te espera todas las semanas.


Días y Horarios


  • De miércoles a viernes de 11.30 a 16.30 HS.



  • Sábado y domingo 10.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)



  • Feriados de 12.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)



Una oferta que no te podes perder para visitar lo nuestro patrimonio nacional. 


Patio de Honor

Entrada $5 por persona. Menores de 11 años, colegios, jubilados y pensionados no abonan entrada.

Consultar al 02323- 420245 por visitas guiadas para los colegios. 


Paso a paso, todo el Museo Provincial de Transporte (Parte III)



8 patas y un camino

Dos personajes capaces de lograr una de las más grande proezas, eran nada más ni nada menos que dos caballos criollos oriundos de la Patagonia Argentina. A estos heroicos animales, se los conoce como “el Gato” y “el Mancha”.

De un temperamento difícil de domar, ambos caballos fueron solicitados por el jinete suizo Aimé Félix Tschiffely a Emilio Solanet, su cuidador y uno de los fundadores de la Asociación de Criadores de Caballos Criollos de Argentina, quien se los regalo convencido de la fortaleza de estos dos animales.

Un recorrido asombroso

A cargo de la expedición se encontraba Tschiffely, quien partió con los dos criollos desde la Sociedad Rural Argentina en Buenos Aires, el 24 de abril de 1925. La travesía más famosa del mundo logró consagrar a los caballos y a su guía, al otorgarle el récord mundial de distancia y altura, debido a que todo el trayecto abarcó los 21.500 kilómetros que separan la capital de Argentina con Nueva York.  La totalidad del viaje se desarrolló en 504 etapas con un promedio de 46,2 kilómetros por día.

La superioridad en altura la consiguieron porque,  durante su recorrido, cruzaron varias veces la Cordillera de los Andes y fue en esos cruces donde mayores dificultades encontraron. El escabroso camino se eleva a más de 5500 metros y la temperatura llega a -18 °C.

Más de tres años después de haber salido de Buenos Aires, el 20 de septiembre de 1928, Tschiffely y “Mancha” arribaron a Nueva York.

Aimé Félix Tschiffely, "Gato" y "Mancha" 


En una editorial del día siguiente quedó plasmado la hazaña: "Después de más de tres años y cinco meses, Aimé montado en Mancha, su fiel compañero (Gato tuvo que quedarse en la Ciudad de México al ser lastimado por la coz de una mula), logró la hazaña: al llegar a la Quinta Avenida de Nueva York llevaba en los cascos de su caballo criollo el polvo de veinte naciones atravesadas de punta a punta, en un trayecto más largo y rudo que el de ningún conquistador, y sobre su pecho, en moño blanco y celeste, bien ganados como una condecoración, los colores argentinos".

El Honorable Senado de la Nación Argentina y la Cámara de Diputados, en conmemoración a la fecha en que Mancha y Gato entraron en la Ciudad de Nueva York, han designado el día 20 de septiembre de cada año como el "Día Nacional del Caballo".

Meses después de la llegada a Norteamérica, más precisamente el 20 de diciembre de 1928, ambos animales fueron regresados a Buenos Aires. Se alojaron en la Estancia “El Cardal”, donde eran visitados por su amigo de aventura, el suizo Aimé. Cuenta una anécdota que “Tschiffely va a visitar a sus amigos, a quienes hace mucho que no ve, y con quienes compartió tantos momentos de alegría y sinsabores. Se baja en la entrada de la estancia, lanza un silbido y al momento se le acercan al trote "Gato" y "Mancha". Iban al encuentro de su preciado compañero. Aquellos heroicos caballos criollos no lo habían olvidado”.

El resto de su vida lo pasaron en esa Estancia, al cuidado del paisano Juan Dindart. “Mancha” y “Gato” fallecieron en 1947 y 1944, respectivamente. En la actualidad, se encuentran embalsamados en el Museo de transporte (Complejo Museográfico Provincial "Enrique Udaondo") de la cuidad de Luján, provincia de Buenos Aires.













Hoy se encuentran en nuestro Complejo restaurados



http://tn.com.ar/programas/en-el-camino


lunes, 22 de octubre de 2012


Paso a paso, todo el Museo Provincial de Transporte (Parte II)


Un paso que unió dos continentes

El primer hidroavión que realizó la gran hazaña de unir, en un vuelo trasatlántico, a España y América fue denominado: “Plus Ultra”.

Esta maquina, que perteneció al Ejército español, posee un amplio casco de doble pendiente, totalmente metálico, y flotadores de sección aerodinámica para darle mayor estabilidad en el agua. Además, el uso del radiogoniómetro, utilizado por primera vez en este tipo de vuelos, permitió a la aeronave mantenerse en la ruta correcta, sin desviaciones en la etapa más larga del recorrido.

Las etapas de la expedición

La expedición comenzó el 22 de enero de 1926, cuando despegó frente a La Rábida en Palos de la Frontera (Huelva). En él, viajaban cuatro tripulantes: el comandante Ramón Franco (hermano del Jefe de Estado Español, Francisco Franco); el capitán Julio Ruiz de Alda; el teniente de navío Juan Manuel Durán y el mecánico Pablo Rada, todos ellos españoles.

Técnicamente, los registros de ese momento demuestran que el Plus Ultra recorrió 10.270 kilómetros  empleando 61 horas y 44 minutos de vuelo, en siete etapas, desarrolladas durante 19 días, con 7 jornadas de vuelo, a velocidad media de 172 kilómetros por hora.

La primera etapa, tras ocho horas de vuelo sobre el Océano Atlántico, se inicia en Palos de la Frontera en el muelle de la Calzadilla, elevándose frente a La Rábida en la desembocadura del río Tinto y termina en Las Palmas de Gran Canaria, acuatizando en el Puerto de la Luz. El día 26, durante nueve horas y cincuenta minutos, parte desde la bahía de Gando rumbo a Porto Praia (Islas de Cabo Verde), para dar por finalizada la segunda etapa del recorrido.



Durante el viaje, que lo depositaría en la isla de Pernambuco, el avión sufrió un desperfecto cuando una hélice se rompe y es necesario arreglarla en pleno vuelo. Este percance logra retrasar, aproximadamente, una hora la travesía.

La etapa final, luego de recibir en tierra brasileña la reparación necesaria, comienza con el vuelo que llega hasta Río de Janeiro, el 4 de febrero. El día 9, aterriza en Montevideo, con el objetivo de finalizar su recorrido, al día siguiente, en tierra argentina.

El 10 de febrero, tras un vuelo de 44 minutos, se divisó en el cielo el majestuoso hidroavión  Plus Ultra, quien cumplió la séptima y última etapa, llegando a la ciudad de Buenos Aires. Las crónicas de ese momento cuentan: “Sobre las aguas del Río de la Plata, por el sudeste, en dirección a Montevideo, apareció un punto oscuro que fue agrandándose, arrancando una ovación continua en la muchedumbre que solo era superada, por momentos, por bombas de estruendo y las sirenas de barcos anclados en el puerto metropolitano”. 

Esa fue una hazaña que dejo maravillado a todo el mundo, quienes celebraban la unión y el nuevo desarrollo de ambos continentes. 

Luego de ser donado por el Rey Alfonso XIII de España a la Armada Argentina para utilizarlo como avión correo hasta ser retirado del servicio, el Plus Ultra, se encuentra, actualmente, en exhibición en el Complejo Museográfico Provincial "Enrique Udaondo" de la ciudad de Luján, Argentina.

Sólo se lo ha movido de Argentina en dos ocasiones, desde el 10 de febrero de 1926: la primera en la década de los años 60 para ser mostrado en una feria en Madrid y la segunda, en los años 80 para ser completamente restaurado. El 17 de agosto de 1988, tras la restauración en España, el pueblo y el gobierno de Luján lo recibieron nuevamente.

Una anécdota cuenta que "cada vez que era traslado se debía demoler la pared del salón donde esta ubicado, debido a su enorme tamaño". 



Fotógrafo: Pablo Ruiz.






Fotógrafo: Pablo Ruiz.




Continuara.....


viernes, 19 de octubre de 2012


Paso a paso, todo el Museo Provincial de Transporte (Parte I)

Antes de que demos todas las características correspondientes a la evolución de los diferentes transportes, hay que desarrollar el surgimiento de los caminos para que estos vehículos pudieran transitaran.

La necesidad de abrir rutas para el tránsito de carretas y caballos, se dejó sentir desde los primeros días de la conquista. También, se impulsó la señalización de los diferentes caminos. El “Camino Real para los reinos de Chile y Perú” fue la primer carretera que comunicaba con esos lugares y tenía sus primeras postas en los actuales pueblos de Morón, Merlo y Luján.

Luján, era el lugar por el que pasaban los caminantes y el comercio para el interior del territorio y sus fronteras, demás cabe destacar que el primer puente que se tendió en el territorio del río de la Plata fue sobre el río de Luján, construidos en virtud de una Real Cédula del Rey de España Fernando VI, del año 1755.

Las postas en el camino

Las primeras postas, distantes una de la otra 6 o 7 leguas, se establecieron en los caminos reales y fueron creadas por el Virrey Juan José de Vértiz, en 1772.

Estos parajes eran lugares de recambio de caballos o mulas y estaban administradas por un maestro de posta, quien se ocupaba de la tarea de cambiar los animales o acompañar a los viajeros  hasta la próxima posta.

El primer andar 

La carreta, en América,  fue introducida por los españoles a fines del siglo XVI. Durante trecientos años, constituyeron el más importante medio de transporte de mercaderías y personas por el territorio de la actual República Argentina. 

Con la introducción de la rueda y de la mula, se multiplicó la capacidad de carga y mejoró, sensiblemente, la rapidez en el transporte de pasajeros, transformándose en una herramienta  fundamental para la economía.
A comienzos del siglo XIX, las comunicaciones de los pueblos del interior con Buenos Aires lograron un equilibrio gracias a las carretas.

En 1595, el gobernador Juan Ramírez de Velazco introdujo en los territorios de Tucumán y el Río de la Plata cuarenta carretas destinada para la comunicación y el comercio entre Buenos Aires y Potosí. También, esos transportes llegaban hasta Mendoza, San Juan y la frontera del Perú, y pasaban a Chile por el sur.

No hay ninguna duda que las carretas fueron muy importantes como medio auxiliar, pero además como actividad industrial, ya que en su fabricación intervenían una importante cantidad de artesanos y ayudantes. Lamentablemente, con la llegada del ferrocarril y el alambrado, éstos lentos y pesados vehículos comienzan a desaparecer.

Carreta Quinchada

Materiales: Madera de naranjo y lapacho, caña, hierro, junco y cuero de potro.
Capacidad: 2.500 Kilos o seis personas.
Procedencia: Región de Cuyo.
Época: Finales del siglo XVIII
Antecedentes: Perteneció a José Vicente Zapata, patriota que contribuyó al sostenimiento de Ejército de los Andes. Es uno de los vehículos más antiguos de esta clase, que se conserva en el país. 


La época del rojo punzó 

Este periodo, en el que todo estaba teñido de un rojo furioso, existían las Literas, también llamadas lecho portátil. Su origen podría relacionarse con un estilo oriental, y desde remotos tiempos fue usada por los egipcios, que la habían copiado de los palanquines usados en la india antigua.

En tiempos del gobernador Juan Manuel de Rosas, finalizando la primera mitad del siglo XIX, se usaron en Buenos Aires literas que eran llevadas por negros, que transportaban a pulso a las personas que ocupaban el vehículo.

Litera/ Silla de mano

Material: Madera, tela, vidrio.
Capacidad: 1 persona.
Procedencia: Desconocida.
Época: Siglo XVIII
Antecedentes: Perteneció a León Ortiz de Rozas y a su esposa, Agustina López y Osorio, padres del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Juan Manuel de Rosas. 













La comodidad en el viaje 

Hasta bien entrado el siglo XIX, sólo se podía atravesar la pampa a caballo, en carreta o en coche de sopanda. Estos últimos, se caracterizaban por el sistema de suspensión de sopandas de cuero.

A principio del siglo XVII, al iniciarse el empleo de la galera, furgones o coches de sopandas en el Río de la Plata, mejoraron mucho las condiciones de los viajes al interior, siendo más rápida que las carretas y ofreciendo mayores comodidades a los viajeros. 

Estos carruajes coloniales se fabricaban en América; las dimensiones variaban según el gusto o la necesidad de su conductor o comprador. Toda la construcción estaba sostenida por gruesas sopandas (correas) de cuero y sus cuatro grandes ruedas.




Coche Sopanda/ Galera/ Furgón

Materiales: Madera de algarrobo y urunday, hierro, vidrio, cuero.
Capacidad: 4 personas.
Procedencia: Desconocida.
Época: Finales del siglo XVIII o principios de siglo XIX
Antecedentes: Este coche fue utilizado por el General Manuel Belgrano, el 20 de febrero de 1813, día de la batalla de salta.



Berlín en Argentina 

Unas de las primeras cocherías, en las calles 25 de mayo y Cangallo, pertenecía a un inglés llamado Jorge Morris. Esta fue la primera fábrica de reconocida importancia, donde se construían coches a la europea, como las berlinas, originarias de Berlín. 

Dichos vehículos poseían elásticos helicoidales de hierro para la suspensión, lo que los hacía más confortables que los viejos carruajes con suspensión de sopandas.



Berlina Roja

Materiales: Madera, hierro, vidrio, cuero.
Capacidad: 4 personas.
Procedencia: Francia.
Época: Década de 1830
Antecedentes: Fue utilizada por el hermano del Gobernador Juan Manuel de Rosas, Prudencio Ortiz de Rozas en 1839, durante la revolución de los hacendados del Sur.



Berlina Verde

Materiales: Madera, hierro, cuero, vidrio.
Capacidad: 4 personas.
Procedencia: Francia.
Época: Década de 1840
Antecedentes: Perteneció a los esposos Ambrosio Lezica y Rosa Lastra. También fue utilizada por el gobernador de Buenos Aires, el doctor Pastor Obligado, por el doctor Dalmacio Vélez Sarfield y Domingo Faustino Sarmiento, entre otros. 






Los primeros transportes de pasajeros

A mediados del siglo XIX la población, en general, no poseía vehículo para realizar largos viajes. Existían sí, algunos correos regulares entre ciertas ciudades como Buenos Aires, Rosario, Santa Fe o Córdoba. Sin embargo, estas diligencias no eran del todo seguras debido a que no se podía contar con su entrega en una fecha exacta, ni mucho menos, para la conducción de otra cosa que no fueran cartas o paquetes pequeños.

Los progresos del país hicieron necesario el establecimiento de un medio de transporte y comunicación más regular y cómodo. Así, en 1854, se estableció una línea regular de mensajería para recorrer todas las capitales argentinas, permitiendo la comunicación en fechas fijas y el transporte de pasajeros y encomiendas.

Estas diligencias, aseguraban la regularidad de la salida y llegada de las mismas. Las primeras  tenían establecidos recorridos y tiempos fijos, el trayecto de Rosario a Córdoba, en 3 días; de Córdoba a Santiago de Estero, 6 días; de Tucumán a Salta, 6 días. Mientras que el recorrido Rosario a Mendoza, demoraba 10 días y de Mendoza a San Juan, 2 días.



Diligencia

Materiales: Madera, chapa, vidrio, hierro.
Capacidad: 8 personas adentro, 3 personas adelante y 1 persona arriba.
Procedencia: Provincia de Buenos Aires.
Época: Década de 1890
Antecedentes: Fue conocida como “La Pobladora” y era utilizada para hacer viajes entre el pueblo de General Lamadrid y el de San Carlos de Bolívar.



Rieles que transportaban progreso

 En la Argentina no estaban dadas las condiciones que planteaba la nueva organización mundial, para producir, vender y comprar. Las producciones seguían siendo rudimentarias y las mercaderías eran transportadas como en tiempos de la colonia. Iniciada la segunda mitad del siglo XIX, dos intelectuales del momento, Domingo Faustino Sarmiento y Juan Bautista Alberdi, sintetizaron el pensamiento de muchos.

Sarmiento, pensó en el modelo de la sociedad norteamericana que planteaba poblar el país y “educar al soberano”, es decir al pueblo. Alberdi, por su lado, planteó que el país debía abrir sus puertas al comercio, a la inmigración, a los capitales extranjeros e impulsar la empresa privada. 

En cambio, para esa misma etapa, Europa y Estados Unidos iniciaron un largo período de más de 20 años de actividad comercial y prosperidad. Es así como, poco a poco, los capitalistas europeos comenzaron a invertir en América, prestando dinero a los gobiernos y construyendo ferrocarriles.

El primer ferrocarril argentino nació, oficialmente, en enero de 1854. La legislatura de Buenos Aires sancionó una ley otorgando la concesión para construir una línea ferroviaria desde la ciudad de Buenos Aires hacia el oeste de la misma.  Ese año, en la Confederación Argentina, el presidente Justo José de Urquiza mandó contratar un ingeniero en los Estados Unidos “que sea práctico en caminos de hierros”, a fin de estudiar el trazado del ferrocarril de Rosario a Córdoba, que se comenzó a construir un año después.

La primera estación, inaugurada el 29 de agosto de 1857, se ubicaba en las inmediaciones de Parque de Artillería, donde hoy se halla el Teatro Colón. El día de la presentación, la gente se congregaba en el Parque y en las calles del trayecto para saludar; con aclamaciones, pañuelos y sombreros; a la primera locomotora, al progreso.

“La Porteña” permaneció en servicio hasta 1890, fecha en que el Gobierno vendió la empresa a una compañía particular, ésta la utilizó para maniobrar durante diez años, posteriormente pasó a los talleres del ferrocarril en Liniers, debido a que por una cláusula especial, no estaban comprendida en la venta por considerársela una reliquia histórica. 

El ferrocarril, los puertos modernos y la inmigración fueron la llave para la expansión económica. Esta conjunción de factores convirtió a la Argentina de aquellos años en el “granero del mundo”. 

Locomotora “La Porteña”

Materiales: Hierro, madera.
Capacidad: 2 personas.
Precedencia: Inglaterra.
Época: 1852
Antecedentes: Esta máquina a vapor prestó servicio en Egipto y luego en la Guerra de Criméa. En 1857, fue adquirida por el gobierno de la Provincia de Buenos Aires. Desarrolla entre 15 y 20 kilómetros por hora y pesa más de 15 mil kilos.






























Coche ferroviario

Material: Madera de pino y roble inglés, hierro cuero.
Capacidad: 16 personas.
Procedencia: Inglaterra.
Época: Década de 1850
Antecedentes: Es uno de los coches adquiridos en Inglaterra junto a “La Porteña”.



Veloz transporte de pasajeros

Los tranvías desencadenaron, en su momento, gran oposición entre los vecinos de la ciudad de Buenos Aires, debido a la gran velocidad que desarrollaban y a la trepidación que producían. Con el paso del tiempo, las quejas se iban atenuando y el tranvía llego a constituir un medio de comunicación rápido y económico. 

La primera concesión para instalar una línea de tranvías la obtuvieron los hermanos Julio y Federico Lacroze, en 1868.

Los primeros antecedentes del tranvía en Buenos Aires, datan de 1863, año en le que el Ferrocarril de Norte, libró al servicio una línea que transportaba pasajeros desde la estación 25 de mayo, frente a la casa de Gobierno hasta la estación Retiro.

Hacia 1866, circulaba un tranvía similar que iba desde la estación Constitución hasta el Pasaje del Pecado, en la actual Avenida 9 de Julio y Moreno.


Tranvía a Caballos

Materiales: Madera, hierro, vidrio, cuero
Capacidad: 15 personas.
Procedencia: Estados Unidos.
Época: Década de 1880.
Antecedentes: Perteneció a la Compañía de Tranvías Anglo-Argentina Ltda. Y se usó como transporte hasta 1904.









jueves, 18 de octubre de 2012


A metros de la Basílica Nuestra Sra. de Luján, podrás encontrarte con el Museo de Transporte e Histórico Provincial. El Complejo Museográfico “Enrique Udaondo” atesora importantes piezas del pasado con magia propia.

De miércoles a domingo podrás disfrutar de su circuito histórico y temático. Una conjunción de salas que invitan a recorrerlas, te espera todas las semanas.


Días y Horarios


  • De miércoles a viernes de 11.30 a 16.30 HS.




  • Sábado y domingo 10.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)




  • Feriados de 12.30 a 17.30 Hs. (Visitas guiadas gratis con tu entrada)

Hidroavión Plus Ultra




Una oferta que no te podes perder para visitar nuestro patrimonio nacional.

Entrada: $5 por persona. A los menores de 11 años, jubilados y pensionados no se le cobra entrada, es totalmente gratuito.